La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sufrió un revés judicial al perder una demanda relacionada con el Tren Maya. La Séptima Sala Regional Metropolitana del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) anuló el cobro de más de 86 millones de pesos que la Sedena exigía a la empresa Energía Solar y Proyectos de Ingeniería, contratada para suministrar balasto para el tramo 6 del proyecto.
El conflicto se originó en mayo de 2023, cuando el contrato fue rescindido por presuntos retrasos en la entrega del material, utilizado para dar estabilidad a las vías ferroviarias. La empresa, ubicada en Coatzacoalcos, Veracruz, argumentó que los retrasos se debieron a lluvias intensas que dañaron la infraestructura vial necesaria para el transporte del balasto. Además, la compañía señaló que el procedimiento de rescisión fue ilegal porque el general Ricardo Gustavo Vallejo, quien lo inició, no tenía facultades legales para hacerlo.




El TFJA falló a favor de la empresa al determinar que la rescisión fue ejecutada por una autoridad incompetente y declaró nulas todas las actuaciones derivadas. El tribunal también señaló que la Sedena omitió otorgar facultades al general para rescindir contratos desde 2019, lo que invalidó el reclamo de los fondos.
El contrato, firmado en octubre de 2022, estipulaba un anticipo de más de 107 millones de pesos y la entrega de 208 mil metros cúbicos de balasto antes de abril de 2023. Aunque la empresa no cumplió con las fechas, el tribunal reconoció las condiciones de fuerza mayor y rechazó los motivos de rescisión presentados por la Sedena.
El tramo 6 del Tren Maya, de Tulum a Chetumal, es uno de los segmentos más retrasados del proyecto. Aunque el tren comenzó a operar en diciembre pasado, la infraestructura no está completamente terminada, y partes de la obra aún presentan deficiencias. El caso refleja los retos y controversias en torno a este emblemático proyecto, cuya ejecución ha enfrentado problemas legales, técnicos y ambientales.