La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, recibió en Palacio Nacional a la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, en un encuentro en el que se reafirmó el compromiso de ambos gobiernos en temas de seguridad y migración. La reunión marcó la primera visita oficial de un alto funcionario de la administración de Donald Trump a México y se dio en el contexto de la estrategia binacional de coordinación en estos temas.
Durante el diálogo, ambas delegaciones coincidieron en la importancia de la responsabilidad compartida y el respeto a la soberanía de cada nación. Sheinbaum destacó las contribuciones de la comunidad mexicana en Estados Unidos, mientras que Noem subrayó la necesidad de continuar con el trabajo conjunto para abordar los retos en la frontera, incluyendo el tráfico de drogas y la migración irregular.


Al finalizar la reunión, Sheinbaum calificó el encuentro como “provechoso” y reiteró que la relación entre ambos países se mantiene en un marco de respeto mutuo. Noem, por su parte, reconoció como positivo el despliegue de la Guardia Nacional mexicana para contener los flujos migratorios y combatir el narcotráfico, pero advirtió que “queda mucho trabajo por hacer” en estos rubros.
Uno de los puntos clave de la reunión fue la ratificación del memorándum de entendimiento entre la Agencia Nacional de Aduanas de México y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, firmado en 2022, el cual busca fortalecer la cooperación en la identificación y mitigación de riesgos transfronterizos.


El encuentro se realizó en un contexto de creciente tensión comercial, luego de que el presidente Trump anunciara la imposición de aranceles del 25% a productos mexicanos a partir del 2 de abril. Para evitar represalias económicas, el gobierno de Sheinbaum ha reforzado la estrategia de seguridad fronteriza y ha intensificado los decomisos de drogas, con incautaciones recientes que incluyen cerca de 130 kilos de fentanilo.
La visita de Noem a México formó parte de una gira por América Latina, en la que también sostuvo reuniones con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y con funcionarios colombianos para abordar temas de seguridad penitenciaria y combate al narcotráfico. Su agenda en México, aunque centrada en seguridad, también tuvo implicaciones en la relación comercial entre ambas naciones.
Sheinbaum ha reiterado su disposición a colaborar con Estados Unidos en el tema migratorio, particularmente en la acogida de connacionales deportados y en la contención del flujo de migrantes que intentan cruzar a territorio estadounidense. Con la presión de Washington sobre estos temas, la relación bilateral se mantiene en un delicado equilibrio entre la cooperación y la defensa de la soberanía nacional.