La tragedia en el municipio de Tezoatlán de Segura y Luna, Oaxaca, dejó seis muertos y un menor herido, luego de que un intento de rescate en un pozo terminara en desastre. Según la Coordinación Estatal de Protección Civil y Gestión de Riesgos (CEPCyGR), el accidente ocurrió cuando un hombre ingresó al pozo para recuperar una bomba de combustión interna, sin embargo, quedó atrapado y al intentar ayudarlo, otras cinco personas, entre ellas dos policías municipales, también perdieron la vida.
De acuerdo con el reporte oficial, cuatro de las víctimas fallecieron por la inhalación de gases tóxicos —dióxido y monóxido de carbono— y dos más murieron por ahogamiento. La profundidad del pozo era de aproximadamente 25 metros y las labores de rescate, encabezadas por el Heroico Cuerpo de Bomberos de Oaxaca, se extendieron durante varias horas hasta recuperar los cuerpos durante la madrugada del martes.
Entre las personas fallecidas se identificó al propietario del predio, P. O. G., de 53 años, y a sus hijos, P. A. C., de 39 años, y O. O. P., de 16. También murieron los policías municipales N. R. M., de 44 años, y V. F. M., de edad no precisada. Además, un vecino que intentó ayudar también perdió la vida. La única persona rescatada con vida fue un menor de 16 años, J. M. E., quien logró salir gracias a que estaba atado a una cuerda.
Los primeros indicios apuntan a que la tragedia fue producto de una cadena de intentos de rescate sin las medidas necesarias de seguridad. Las autoridades calificaron el hecho como inédito en la región, destacando que en los últimos 40 años no se había registrado un caso similar. El titular de la CEPCyGR, Manuel Maza Sánchez, señaló que hubo una falta total de precaución y desconocimiento del riesgo que implica ingresar a un pozo con presencia de gases letales.
La situación se volvió crítica cuando, tras la caída del propietario, su hijo y un vecino entraron para intentar salvarlo, pero también quedaron atrapados. Al no tener éxito, se pidió apoyo a los servicios de emergencia. Fue entonces cuando llegaron los elementos policiales que igualmente descendieron sin protección adecuada, repitiéndose el patrón de fatalidad.
