Un video que muestra a una niña llorando mientras suplica que la dejen entrar a su casa en medio de una fuerte lluvia provocó indignación en Veracruz y activó una rápida respuesta de autoridades municipales y estatales. El caso, ocurrido en el fraccionamiento El Campanario, al norte del municipio de Veracruz, fue denunciado por vecinos en redes sociales como un presunto caso de maltrato infantil. Las imágenes, que se viralizaron, mostraron a dos niñas menores de edad expuestas a la intemperie mientras rogaban a su madre abrirles la puerta.
🚨 #Viral | Presunto caso de maltrato infantil genera indignación en redes sociales.
— Golpe Político (@Golpe_politico) July 15, 2025
Un video difundido muestra a un menor suplicando entre sollozos: “Por favor mami, méteme que va a llover y me voy a enfermar”.
El hecho, ocurrido en el fraccionamiento El Campanario, en la ciudad… pic.twitter.com/vwIs8C9Uju
En la grabación se escucha a una de las menores decir entre lágrimas: “Por favor, mami, méteme que va a llover y me voy a enfermar”. Esta súplica provocó una fuerte reacción ciudadana y el llamado urgente a las autoridades para intervenir. El DIF Municipal de Veracruz respondió resguardando a tres niñas menores de seis años, a fin de brindar atención médica y psicológica, así como verificar el entorno familiar. La alcaldesa Patricia Lobeira Rodríguez informó que el caso está en manos tanto del DIF como de la Fiscalía General del Estado.
Las autoridades también investigan otro video grabado en la misma vivienda, donde se observa a un hombre —presuntamente la pareja de la madre— golpeando violentamente a un perro de raza husky. Gracias a la denuncia ciudadana, el animal fue rescatado y permanece bajo resguardo en coordinación con organizaciones como Colitas Felices León. Los vecinos han señalado que el mismo sujeto habría agredido previamente a las menores con violencia física, utilizando incluso palos.
La Fiscalía Especializada en Delitos contra la Familia ya abrió una carpeta de investigación para determinar la responsabilidad de los adultos involucrados. Mientras tanto, el DIF trabaja en un posible proceso de reintegración familiar, siempre y cuando se garantice un entorno seguro para las niñas. La alcaldesa indicó que se mantendrá reserva sobre algunos datos para proteger a las menores, pero aseguró que se dará seguimiento estricto al caso.
Vecinos del fraccionamiento El Campanario han expresado temor ante posibles represalias, pero insisten en que las autoridades deben actuar con firmeza. “No queremos que pase una tragedia. Las niñas necesitan ayuda, están en peligro”, declaró una vecina, quien pidió anonimato. Este caso ha reavivado el debate sobre el deber de protección hacia menores en riesgo y la urgencia de mejorar los mecanismos de denuncia ciudadana.
El caso sigue en investigación, pero ha dejado clara la fuerza de la denuncia social y el poder de las redes para visibilizar la violencia doméstica. Autoridades locales han reiterado su compromiso de proteger los derechos de los menores y los animales, y piden a la población seguir colaborando en la identificación de posibles situaciones de abuso.