El gobierno federal anunció la suspensión de la importación de calzado terminado bajo el régimen de importación temporal, con el objetivo de frenar el contrabando, recuperar empleos y fortalecer la producción nacional. El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, informó que el decreto ya fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), lo que impide que las empresas traigan zapatos listos para su venta bajo el esquema IMMEX, un mecanismo diseñado originalmente para la maquila de exportación.
Ebrard explicó que dicho régimen permite importar mercancía exenta del pago de impuestos con la condición de que sea exportada nuevamente, como sucede en la industria automotriz. Sin embargo, en el caso del calzado, muchas compañías retenían los productos —en su mayoría provenientes de Asia— para comercializarlos en el mercado interno, lo que significaba evasión de IVA y afectaba directamente a los fabricantes nacionales. “Estaba haciendo un daño muy grande a la industria del calzado”, advirtió el funcionario.
La presidenta Claudia Sheinbaum respaldó la medida y señaló que el uso de la importación temporal para productos terminados era un abuso del programa IMMEX. “Los productos terminados deben pagar sus impuestos. No se justifica su entrada como importación temporal”, afirmó, destacando que la industria zapatera es una de las más tradicionales del país, con más de 130 mil empleos directos.
Los datos respaldan la preocupación del gobierno: en 2024 las importaciones de calzado bajo el esquema IMMEX crecieron 159% en volumen y 60% en valor respecto a 2023. Esta situación derivó en una caída del 12.8% en el PIB del sector, una reducción del 12.5% en la producción y la pérdida de casi 11 mil empleos formales. Además, la proporción de exportaciones frente a importaciones pasó de seis pares por cada uno en 2021, a menos de un par por cada uno en 2024.
Organismos empresariales como la Cámara Nacional de la Industria del Calzado (Canaical) y la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato (CICEG) celebraron la exclusión del calzado terminado del IMMEX. Señalaron que se trata de “una acción contundente contra el contrabando y la subvaluación” que permitirá condiciones más justas de competencia y ayudará a preservar los empleos en el sector.
De acuerdo con la CICEG, entre 2022 y 2024 las importaciones de calzado terminado bajo IMMEX se dispararon de 3.79 millones a más de 40 millones de pares, sin evidencia de que se hubieran retornado a su país de origen, como establece el programa. Para los empresarios, esta distorsión del mercado resultaba insostenible, pues fomentaba la evasión fiscal, el cierre de empresas y la pérdida de miles de puestos laborales en México.
El decreto entrará en vigor el 29 de agosto de 2025. Las cámaras empresariales reconocieron la coordinación entre la Secretaría de Economía, la Agencia Nacional de Aduanas de México, la Unidad de Inteligencia Financiera, así como la Concamin y los gremios textil y del vestido, para frenar estas prácticas. “Confiamos en que la medida fortalecerá el mercado interno y permitirá que nuestras empresas compitan en condiciones más justas”, concluyeron.