La senadora de Morena, Laura Itzel Castillo Juárez, rindió protesta este viernes como presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República para el segundo año de ejercicio de la LXVI Legislatura, luego de obtener 101 votos a favor en una elección por cédula. La legisladora se comprometió a conducir los trabajos de la Cámara Alta con institucionalidad, respeto a la pluralidad política y apertura hacia todas las bancadas.
Durante la sesión, Castillo subrayó que asume la encomienda con responsabilidad y convicción democrática, poniendo al servicio del pleno su experiencia y capacidad legislativa. Enfatizó que su compromiso es con el buen funcionamiento del Senado, así como con el proyecto de transformación nacional iniciado por Andrés Manuel López Obrador y continuado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
En su mensaje, la nueva presidenta llamó a que el Senado sea un espacio de debate libre y de altura, sin odio, racismo, clasismo ni machismo. Al mismo tiempo, refrendó su compromiso absoluto con el movimiento de izquierda que representa Morena, pero advirtió que actuará con respeto hacia todas las fuerzas políticas para garantizar el diálogo y la construcción de consensos.
La Mesa Directiva quedó integrada con Verónica Noemí Camino Farjat, de Morena; Imelda Sanmiguel Sánchez, del PAN; y Jorge Carlos Ramírez Marín, del PVEM, como vicepresidentes. Asimismo, se eligieron a secretarios de distintas bancadas, entre ellos Simey Olvera Bautista y Mariela Gutiérrez Escalante, de Morena; Claudia Edith Anaya Mota, del PRI; Lizeth Sánchez García, del PT; y representantes de PAN, PVEM y Movimiento Ciudadano.
Castillo resaltó que esta integración refleja la pluralidad del Senado, donde todas las fuerzas políticas tendrán representación en la conducción de los trabajos legislativos. Recordó que será en la próxima sesión ordinaria cuando se tome protesta a los secretarios faltantes, entre ellos Gustavo Sánchez Vásquez del PAN.
El senador Gerardo Fernández Noroña, presidente saliente, agradeció a todos los grupos parlamentarios el apoyo recibido durante su gestión. Reconoció que presidir el Senado fue “una gran responsabilidad y un gran privilegio”, más allá de los diferendos entre bancadas, y destacó el intenso trabajo legislativo realizado durante su año al frente de la asamblea.
En una conferencia posterior, Castillo reiteró su disposición a mantener apertura con la oposición y con los medios de comunicación. Aseguró que trabajará con lealtad y patriotismo, siempre velando por el bienestar del país y fortaleciendo al Senado como un órgano comprometido con la igualdad, la justicia social y la libertad de pensamiento.
Finalmente, la senadora subrayó el carácter histórico del momento, al coincidir con los 200 años de la instalación del primer Senado y con la próxima toma de protesta de más de 800 jueces electos en el marco de la reforma judicial. “Sigamos haciendo historia, porque nos debemos al pueblo; con el pueblo todo, sin el pueblo nada”, concluyó.