La noche del miércoles 30 de abril, un joven de entre 20 y 25 años perdió la vida tras arrojarse del puente Xallitic, ubicado en el Centro Histórico de Xalapa. El incidente ocurrió cerca de las 20:00 horas, cuando aún permanecían abiertos los comercios y había considerable afluencia de personas y vehículos en la zona. De acuerdo con testigos, el joven caminaba solo con paso firme, sin aparentes signos de angustia, hasta que, de forma repentina, escaló el muro de contención y se dejó caer al vacío, falleciendo de inmediato.
Elementos de la policía municipal y estatal, así como cuerpos de emergencia, acudieron al sitio, donde confirmaron que el joven ya no contaba con signos vitales. Su cuerpo quedó tendido boca abajo sobre el pavimento, mientras las autoridades acordonaban el área para facilitar las diligencias. La vestimenta de la víctima fue descrita como pantalón de mezclilla, camiseta negra, sudadera gris oscuro amarrada a la cintura y tenis negros con blanco.
Un detalle que llamó la atención de las autoridades fue el hallazgo de un trozo de carne cruda en una de sus manos. Aunque aún no se confirma oficialmente, se investiga si dicho objeto estaba impregnado con alguna sustancia tóxica o si su propósito era atraer a algún animal. Esta línea de investigación se suma a la recolección de testimonios y revisión de cámaras de seguridad en la zona para esclarecer las circunstancias del hecho.
Hasta el momento, no se ha dado a conocer la identidad del joven ni se ha confirmado si dejó alguna nota que explique los motivos de su aparente decisión. Personal de la Dirección de Servicios Periciales realizó el levantamiento del cuerpo, el cual fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) en espera de ser identificado por familiares.
El puente Xallitic, con una altura superior a los 20 metros, ha sido escenario de diversos actos similares en el pasado. Según reportes históricos, esta estructura ha sido elegida en múltiples ocasiones por personas con estados emocionales de depresión o ansiedad para atentar contra su vida, lo que ha encendido alertas sobre la necesidad de mayor vigilancia y atención a la salud mental.
Las autoridades locales reiteraron la importancia de buscar ayuda profesional en casos de crisis emocional, y exhortaron a la población a acercarse a las líneas de atención y apoyo disponibles. Mientras tanto, la zona permanece bajo resguardo a la espera de más información que permita esclarecer el caso.
