El Órgano de Administración Judicial (OAJ) anunció que del 8 al 12 de septiembre se llevará a cabo un curso de especialización dirigido a los más de 800 jueces y magistrados que resultaron electos en los recientes comicios judiciales. La capacitación se desarrollará en la Escuela Nacional de Formación Judicial y en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur en la Ciudad de México, además de contar con transmisión remota para otros circuitos del país.
La convocatoria, publicada por la magistrada Lorena Josefina Pérez Romo, establece que el curso será de carácter obligatorio para los nuevos juzgadores. La medida busca preparar a quienes asumirán juzgados y tribunales en un plazo máximo al 15 de septiembre, fecha límite fijada tras la prórroga aprobada por el extinto Consejo de la Judicatura Federal.
El programa se denomina “Curso de Especialización para Personas Juzgadoras Electas Edición 2025” y se impartirá tanto de manera presencial como en línea. Con esta instrucción se pretende dotar a los recién electos de herramientas básicas para el desempeño de sus funciones, pues muchos de ellos carecen de experiencia jurisdiccional, lo que ha generado preocupación en diversos sectores.
El curso estará a cargo de la Escuela Nacional de Formación Judicial, encabezada actualmente por Sergio Javier Molina Martínez, exconsejero de la Judicatura identificado con la 4T. En el caso de los jueces del Sistema Penal Acusatorio, las sesiones también se realizarán en las instalaciones del Reclusorio Sur.
Antes de la reforma judicial, el acceso a cargos de juez y magistrado implicaba aprobar cursos y exámenes rigurosos en la Escuela de Formación Judicial. Sin embargo, con el nuevo esquema de elección popular, el requisito fue eliminado y para competir en los comicios solo se pidió contar con un promedio mínimo de 8 en la universidad, acreditar conocimientos en materias relacionadas y presentar cartas de recomendación vecinales.
Las críticas a esta modalidad han señalado que la eliminación de la carrera judicial abre la puerta a la improvisación y la falta de profesionalización en la impartición de justicia. El curso exprés busca atenuar esas preocupaciones, aunque su duración y alcance han sido cuestionados frente a la complejidad de las funciones que los nuevos juzgadores deberán asumir.