La Secretaría de Salud de Puebla confirmó la detección de 11 casos probables de virus coxsackie en menores de edad que participaban en un curso de verano del club deportivo Alpha III, en la capital del estado. El hallazgo se produjo tras una visita del personal jurisdiccional al sitio, donde se notificó a los tutores y se retiró de inmediato a los menores para recibir atención médica y prevenir nuevos contagios. La autoridad estatal indicó que las acciones preventivas se mantendrán hasta la conclusión del curso.
El club Alpha III reconoció la existencia de casos sospechosos —aunque en un principio reportó solo siete— y aseguró que los contagios se concentraron en esa sede. Desde el jueves, la administración reforzó los protocolos de limpieza e higiene, recomendó a los usuarios extremar el lavado de manos y el uso de cubrebocas, sobre todo en menores de edad, quienes son más susceptibles a contraer la enfermedad.
El virus coxsackie, perteneciente a la familia de los enterovirus, provoca síntomas como fiebre, dolor de garganta, falta de apetito y la aparición de ampollas dolorosas en manos, pies y boca. Según el médico deportivo José Manuel Neblina Exzacarías, la enfermedad carece de un tratamiento específico, por lo que el manejo es sintomático, con hidratación, reposo y vigilancia médica. En la mayoría de los casos, agregó, la recuperación ocurre en menos de una semana.
Pese a la confirmación del brote, padres de familia denunciaron que el club mantiene en agenda la realización de una acampada denominada “Lunada”, que reuniría a participantes de las cuatro sedes en el parque Cimera. El evento contempla actividades como un rally, lo que ha generado preocupación entre los tutores por el riesgo de una mayor propagación del virus.
Ante la denuncia, autoridades sanitarias reiteraron al club la importancia de cumplir con las recomendaciones de revisión médica, uso de cubrebocas, lavado frecuente de manos y desinfección constante de las áreas comunes. La Secretaría de Salud enfatizó que estas medidas son esenciales para cortar cadenas de transmisión, especialmente en actividades grupales.
El brote en Alpha III se produce en un contexto en el que, según la Secretaría de Salud, no se ha detectado un incremento significativo de casos de coxsackie en el estado en comparación con el año pasado, por lo que no existe una alerta o contingencia sanitaria. Sin embargo, el gobierno estatal subrayó que se mantiene vigilante ante cualquier situación que represente un riesgo para la salud pública.
La enfermedad es común en guarderías, escuelas y actividades recreativas con alta interacción física, particularmente en temporada de verano. Su fácil transmisión, a través del contacto directo o por superficies contaminadas, hace que la prevención dependa en gran medida de la higiene personal y la responsabilidad comunitaria para aislar a los enfermos.