Charlie Kirk, comentarista conservador de 31 años, fundador de Turning Point USA y una de las figuras más influyentes de la derecha estadounidense, murió este miércoles tras recibir un disparo en un evento de preguntas y respuestas en la Universidad del Valle de Utah, en Orem. Según testigos, un solo tiro impactó en su cuello cuando dialogaba con estudiantes, lo que provocó pánico y caos entre los asistentes. Aunque fue trasladado de inmediato a un hospital, no sobrevivió a las heridas.
O influenciador de direita charlie kirk sofreu um atentado em um comicio nos Estados Unidos as imagens do acontecido Trump vai falar pic.twitter.com/2VruRtkH4h
— WILL (@mundodenurbix) September 10, 2025
El ataque ocurrió en el patio del Centro Sorensen, donde decenas de jóvenes presenciaban el encuentro. En videos difundidos en redes sociales se observa a Kirk sentado cuando un estudiante le pregunta sobre la violencia armada en Estados Unidos; segundos después se escucha la detonación. La multitud corrió en todas direcciones, mientras algunos se tiraban al suelo para resguardarse. El excongresista Jason Chaffetz, presente en el evento, aseguró que “el disparo fue directamente contra él” y que la seguridad en el lugar era insuficiente.
Las autoridades informaron inicialmente sobre la detención de dos sospechosos, pero posteriormente fueron liberados al no hallarse pruebas en su contra. Investigadores federales señalaron que el disparo pudo haberse hecho desde una posición elevada, como una azotea o una ventana cercana, ubicada a más de 150 metros del escenario. El FBI participa en la indagatoria y señaló que el caso es seguido como un ataque político.
La noticia conmocionó al mundo político. El gobernador de Utah, Spencer Cox, lo calificó como “un asesinato político” y expresó que la violencia no debe tener cabida en la vida pública. Por su parte, el expresidente Donald Trump publicó un mensaje en Truth Social confirmando la muerte de Kirk, a quien llamó “legendario” y “querido por todos”, además de enviar condolencias a su esposa Erika y a sus dos hijos pequeños, de 3 años y 15 meses.
Kirk había construido en poco más de una década un papel protagónico en el conservadurismo estadounidense. Fundó Turning Point USA en 2012, a los 18 años, con el objetivo de difundir valores conservadores en universidades de mayoría liberal. Desde entonces, organizó conferencias y debates en decenas de campus y acumuló millones de seguidores en redes sociales. En X tenía 5.2 millones y en TikTok superaba los 7.3 millones.
Su estilo confrontativo y su cercanía con Trump lo convirtieron en uno de los activistas más influyentes del ala juvenil del Partido Republicano. Además de su trabajo en Turning Point, conducía un pódcast diario en el que abordaba temas como el cambio climático, la identidad de género y los valores familiares. Con frecuencia aparecía en cadenas de televisión conservadoras y era invitado recurrente en conferencias políticas.
La muerte de Kirk ocurre en medio de un clima de violencia política creciente en Estados Unidos, con episodios que han incluido atentados, ataques armados y agresiones contra líderes públicos de distintas corrientes ideológicas. Para sus seguidores, el crimen no solo representa la pérdida de un líder conservador, sino un duro golpe a la libertad de expresión en espacios académicos.
