La próxima presidenta del Senado, Laura Itzel Castillo Juárez, prometió que en la conducción de ese órgano del Congreso actuará con imparcialidad, de forma institucional, sin renunciar a sus principios ni a su trayectoria de izquierda. En entrevista, adelantó que respaldará las iniciativas que envíe al Senado la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, y llamó a la oposición a que la sesión de este viernes, en la que se votará a la nueva Mesa Directiva, se lleve a cabo con respeto, pese a las advertencias del dirigente priista Alejandro Moreno Cárdenas.
Castillo Juárez, acompañada por las senadoras de Morena que la respaldan en la Mesa Directiva, sostuvo que aplicará el reglamento de forma estricta para evitar confrontaciones como las registradas recientemente en la Comisión Permanente. “La política debe de ser un vehículo civilizatorio. Puede haber discusiones muy fuertes, pero lo importante es que haya respeto. Mi obligación es cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes”, enfatizó.
La morenista destacó que, en congruencia con la consigna de “tiempo de mujeres”, la Mesa Directiva propuesta por su bancada estará integrada exclusivamente por legisladoras: Verónica Camino será vicepresidenta, mientras que Martina Kantún y Mariela Gutiérrez fungirán como secretarias. Señaló que la elección se dio por unanimidad, lo que refleja unidad y consenso al interior del grupo parlamentario mayoritario.
Por su parte, la senadora Guadalupe Murguía, quien también compitió por la presidencia, reconoció el triunfo de Castillo Juárez y su trayectoria política. Aseguró que Morena sale fortalecido de este proceso y destacó que “se privilegió la unidad sobre las decisiones personales”. Subrayó que la prioridad es acompañar el proyecto de transformación impulsado por Sheinbaum.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Adán Augusto López, afirmó que Castillo Juárez ejercerá el cargo con el mismo respeto mostrado por su antecesor, Gerardo Fernández Noroña, pese a las críticas de la oposición. Recordó que el rol del presidente del Senado está claramente establecido en la ley: conducir los debates, mantener el orden y garantizar el desarrollo institucional de las sesiones.
Castillo Juárez, hija del histórico dirigente de izquierda Heberto Castillo, reivindicó su militancia en movimientos sociales y partidos progresistas desde los años setenta. Señaló que su conducción en la Cámara Alta estará marcada por el diálogo y la búsqueda de consensos, pero también por la defensa de los principios de la izquierda y del proyecto de la Cuarta Transformación. “Tengo la fortaleza y el compromiso para sacar adelante todos los trabajos del Senado, siempre en apego a la ley y con respeto entre fuerzas políticas”, remarcó.
En sus primeras declaraciones como presidenta electa de la Mesa Directiva, aseguró que su principal reto será contribuir a la consolidación del “segundo piso de la transformación” y mantener un Senado en el que el debate sea intenso, pero civilizado. “Voy a trabajar con institucionalidad, sin renunciar a mis principios y apoyando las iniciativas que envíe nuestra presidenta Claudia Sheinbaum”, reiteró.