Un violento incidente ocurrido en la Universidad Politécnica de Tulancingo (UPT), en Hidalgo, ha causado indignación luego de que se difundiera un video donde un alumno golpea a su profesor en plena clase. El joven, identificado como Manuel, arremete a puñetazos contra el docente mientras lo acusa de haberse burlado de él. Las imágenes, grabadas por un compañero y viralizadas en redes, han generado reacciones divididas entre la comunidad académica y estudiantil.
"Tulancingo":
— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) July 28, 2025
Porque estudiante agrede a maestro de la Universidad Politécnica de Tulancingo en Hidalgo. El alumno reportó que era víctima de acoso por parte del profesor. pic.twitter.com/kuQp729Y77
En el video de 50 segundos, se observa cómo el estudiante se levanta, golpea en varias ocasiones al maestro, lo derriba y continúa agrediéndolo en el suelo, incluso lanzándole un escupitajo. Mientras lanza los golpes, Manuel grita frases como “vuélvete a burlar de mí” y “esas son tus consecuencias, perro”. Aunque algunos compañeros intentaron detenerlo, el ataque no cesó hasta que una joven lo convenció de salir del aula.
Tras el incidente, ocurrido el viernes 25 de julio, la universidad informó que el profesor fue separado temporalmente de su cargo mientras se investiga lo ocurrido. Asimismo, la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) confirmó que el caso fue turnado al Consejo Académico, el cual realizará las diligencias pertinentes y aplicará las sanciones correspondientes conforme al reglamento institucional para determinar las sanciones respectivas.
El Sindicato Único de Trabajadores de la UPT manifestó su “absoluto rechazo a toda forma de violencia al interior de nuestra comunidad académica” y expresó su respaldo al docente agredido. No obstante, algunos usuarios en redes, presuntamente estudiantes del plantel, afirmaron que ya existían quejas previas contra el profesor por conductas inapropiadas y burlas hacia los alumnos, mismas que, aseguran, nunca fueron atendidas por las autoridades.
A pesar de la condena generalizada hacia la violencia del alumno, la falta de acciones preventivas por parte de la institución ha sido duramente criticada. Varios comentarios en redes cuestionan por qué no se actuó antes ante las denuncias contra el profesor, lo que, para algunos, pudo haber evitado el estallido del conflicto. La UPT, por su parte, aseguró que brindará apoyo psicológico y asesoría legal a quienes lo necesiten.
El caso ha puesto sobre la mesa el debate sobre la gestión de conflictos dentro de las instituciones educativas, así como la necesidad de atender de manera oportuna denuncias por maltrato o acoso para evitar que escalen a situaciones de violencia física. Tanto el maestro como el alumno se encuentran fuera de sus funciones mientras se resuelve el proceso disciplinario.