Un operativo conjunto de las autoridades mexicanas culminó con la captura de un destacado operador del cártel de Sinaloa, buscado por Estados Unidos por narcotráfico. La detención se realizó en el estado de Sinaloa, en medio de intensos operativos para reforzar la seguridad ante las disputas internas del grupo criminal. Esta acción forma parte de la estrategia para combatir el tráfico y la distribución de drogas a nivel internacional. Las secretarías de Seguridad y Defensa de México dieron a conocer el suceso, que se suma a la serie de esfuerzos para desmantelar redes delictivas.
El detenido, identificado como José Ángel Canobbio Inzunza y conocido bajo el alias “El Güerito”, era considerado uno de los operadores clave dentro de la estructura del cártel. Se le atribuye la planeación de rutas para la distribución de fentanilo, cocaína y metanfetaminas, lo que le habría permitido gestionar importantes flujos de narcóticos hacia mercados internacionales. Las autoridades sostienen que su papel en la organización era fundamental para el financiamiento y la operatividad del grupo. Su captura representa un duro golpe para el cártel en medio de una campaña de seguridad intensificada.

El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, informó a través de la red social X que personal militar logró detener al operario, cuyo apellido se mantuvo en reserva conforme a la ley. Harfuch destacó que “El Güerito” se encargaba de coordinar la distribución de drogas en diversas rutas internacionales. Además, la Secretaría de Defensa de México señaló que el detenido está ligado al denominado “cártel del Pacífico”, como se conoce en ciertos informes oficiales. La detención se enmarca dentro de los operativos contra el crimen organizado que han intensificado la lucha contra grupos designados como terroristas por Estados Unidos.
En un operativo realizado en la colonia residencial Las Quintas, al oriente de Culiacán, fuerzas de la Secretaría de la Defensa Nacional desplegaron unidades por tierra y aire para cercar la zona habitacional y comercial. Durante la acción, se utilizó una movilización coordinada de helicópteros y vehículos tácticos que permitió identificar y detener a “El Güerito”. Este operativo, llevado a cabo con precisión, se ejecutó en un área estratégica de la ciudad, evidenciando la determinación de las autoridades para desmantelar las redes de narcotráfico. Fuentes de seguridad confirmaron la identidad del detenido en medio de una operación que contó con un despliegue considerable.
La detención fue confirmada también por Omar García Harfuch, quien reiteró que “El Güerito” era conocido como el cerebro financiero de Los Chapitos, la facción liderada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Fuentes de seguridad destacaron que el operador, de 44 años, había sido señalado anteriormente en mensajes y corridos por su vinculación con la organización. La operación se realizó en plena actividad en la zona oriente de Culiacán, marcando un precedente en la lucha contra el narcotráfico en esa región.


Durante la inspección realizada en el operativo, se decomisaron elementos que evidencian el rol central del detenido en la planificación y coordinación de rutas de distribución de drogas. Entre los bienes incautados se encontraban armas, equipos tácticos y una cantidad importante de efectivo, lo que confirma su involucramiento en operaciones delictivas a gran escala. Las autoridades mexicanas y estadounidenses consideran que su captura es un golpe significativo contra el entramado logístico del cártel. Además, su arresto responde a una orden de aprehensión emitida por autoridades de Estados Unidos, lo que añade un componente internacional a la operación.
Ahora, enfrentando una orden de aprehensión en Estados Unidos, José Ángel Canobbio Inzunza ha sido trasladado a la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) en la Ciudad de México, donde el Ministerio Público determinará su situación legal. Se espera que este arresto tenga repercusiones significativas en la operatividad del cártel, ya que se le identifica como un eslabón clave en la cadena de distribución de drogas. La acción conjunta de las fuerzas de seguridad demuestra el compromiso de las autoridades mexicanas para combatir el crimen organizado a nivel nacional e internacional.