En la tarde-noche del domingo, en la localidad de La Capilla, municipio de Cotaxtla, Veracruz, se reportó el secuestro del empresario Vicente Domínguez, quien se desempeña como precandidato de Morena para la alcaldía. Según testigos, el precandidato se encontraba pegando propaganda en apoyo a su precampaña cuando un grupo de hombres armados lo interceptó y lo trasladó a bordo de un automóvil, generando alarma en la comunidad y la activación inmediata de operativos de seguridad.
Vicente Domínguez, reconocido por su trayectoria en el sector de las ferreterías, había anunciado públicamente su intención de postularse para la presidencia municipal, resaltando su compromiso con el servicio y la mejora de la comunidad. Su candidatura, que se encuentra en una etapa temprana del proceso electoral, ha despertado expectativas en la región y le ha conferido relevancia en las encuestas internas del partido.
El secuestro ocurrió en un contexto de creciente violencia y tensión política en la zona. Los agresores, identificados por testigos como hombres enmascarados y armados, actuaron de forma repentina mientras Domínguez pintaba bardas con mensajes alusivos a su precampaña. Los testimonios indican que lo llevaron hacia Tierra Blanca, y la situación fue rápidamente reportada a las autoridades locales, quienes han desplegado operativos para dar con su paradero.
Estos hechos se suman a otros incidentes violentos ocurridos recientemente en la región, como el hallazgo de muertos con huellas de violencia en Paso del Macho, lo que ha contribuido a un clima de inseguridad y preocupación en el ámbito electoral. La proximidad de estos sucesos ha generado un debate sobre la protección de los procesos políticos y la necesidad de garantizar la integridad de los aspirantes a cargos públicos en Veracruz.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado de Veracruz no ha emitido un comunicado oficial respecto al secuestro de Vicente Domínguez, aunque se espera que en breve se conozcan más detalles sobre el caso. Las fuerzas de seguridad, en coordinación con la Policía Municipal, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, continúan con las investigaciones y operativos en la región para localizar al precandidato y esclarecer los hechos que rodearon su privación de libertad.
El incidente ha encendido la indignación tanto en la comunidad local como en el ámbito político, evidenciando la vulnerabilidad de los procesos electorales frente a actos de violencia. El secuestro de Vicente Domínguez pone en tela de juicio la capacidad de las autoridades para proteger a los candidatos y garantizar la transparencia y seguridad en las campañas electorales. Los partidos políticos y las autoridades competentes deberán actuar con rapidez para evitar que situaciones similares se repitan y comprometan la integridad del proceso democrático en la región.
