David Noel Ramírez Padilla, ex rector del Tecnológico de Monterrey y una de las figuras más influyentes en la historia de la institución, falleció a los 75 años de edad, dejando un legado imborrable en la educación y en la comunidad Tec. Originario de San Juan de los Lagos, Jalisco, llegó al Tec en 1967 con una beca para estudiar Contaduría Pública, sin imaginar que su trayectoria marcaría el rumbo del instituto por más de cinco décadas.

Desde sus inicios como profesor, David Noel se distinguió por su vocación docente y su capacidad para inspirar a generaciones de alumnos. Durante 110 semestres consecutivos impartió cátedra, convencido de que la educación debía trascender el aula y formar ciudadanos con sentido humano. Su compromiso con la ética, la responsabilidad social y la participación ciudadana se reflejó en los valores que promovió dentro y fuera de la institución.

Su liderazgo lo llevó a ocupar múltiples cargos dentro del Tec de Monterrey, desde director de carrera y del Departamento Académico de Contabilidad, hasta convertirse en rector en 2011, cargo que desempeñó hasta 2017. Durante su gestión, impulsó la Visión 2020 del Tec, enfocada en formar líderes emprendedores con una perspectiva global y compromiso social. También fue una pieza clave en el desarrollo del Modelo Educativo Tec21 y en la creación de DistritoTec, un proyecto de regeneración urbana que hoy es referente de innovación a nivel mundial.

Más allá del ámbito académico, su influencia se extendió a diversas organizaciones civiles y religiosas. Presidió Padre Pío Asistencia Social, A.B.P., y Dividendo para la Comunidad, A.C., además de recibir múltiples distinciones, entre ellas la Presea a la Participación Ciudadana y el título de Caballero de la Orden de San Gregorio Magno, otorgado por el Papa Juan Pablo II. Fue autor de diversos libros sobre educación, valores y liderazgo, dejando un legado escrito de su visión sobre la formación integral de las personas.

David Noel Ramírez será recordado no solo por sus logros como rector, sino por la cercanía, humildad y pasión con la que desempeñó cada uno de sus roles. Su partida deja un vacío en la comunidad educativa, pero su legado seguirá vivo en las generaciones que formó y en la transformación que impulsó dentro del Tec de Monterrey y la sociedad.

Comparte este artículo
Subscribe
Notify of
guest
0 Comments
Oldest
Newest Most Voted
Inline Feedbacks
View all comments
Scroll al inicio