La presidenta Claudia Sheinbaum descartó un incremento generalizado en los precios de las gasolinas al iniciar el año, asegurando que cualquier ajuste responde únicamente a la inflación. Destacó que su administración mantiene el compromiso de evitar alzas injustificadas y se reunió con empresarios gasolineros para limitar posibles especulaciones en los precios del combustible.
El titular de Profeco, Iván Escalante, informó que durante los primeros meses de la gestión de Sheinbaum, el precio de la gasolina Magna disminuyó 0.4%, manteniéndose entre 23.50 y 24 pesos por litro. Sin embargo, denunció que algunas estaciones de servicio venden hasta en 28 pesos, calificando esto como un abuso no justificable.
Para frenar estas prácticas, Profeco colocará lonas en gasolineras con precios excesivos que adviertan a los consumidores con mensajes como «No cargues aquí; se vuelan la barda con los precios». Esta estrategia busca presionar a las estaciones para ajustar sus costos dentro de los márgenes razonables.
Sheinbaum recordó que durante el gobierno de López Obrador se logró una reducción real del precio promedio de la gasolina en un 5.2%, un contraste con las alzas del 22.9% y 42.8% registradas en los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, respectivamente. La mandataria aseguró que seguirá monitoreando para evitar afectaciones innecesarias a los ciudadanos.
Finalmente, destacó que los costos logísticos y de transporte influyen en los precios, especialmente en regiones alejadas de los centros de almacenamiento de Pemex. Sin embargo, reiteró su compromiso de mantener los precios del combustible bajo control y trabajar en beneficio de la economía familiar
